El Real Murcia se llevó la victoria ante el Alcorcón demostrando que tiene una doble cara importante (3-1)

Fran Fernández eligió un once inicial con una sorpresa, David Vicente como extremo derecho. El lateral ya jugó en esa posición hace dos partidos ante el Sabadell y todos estaban expectantes para ver lo que podía ofrecer el jugador. Alcaina era baja por lesión, Antxón Jaso titular en el central y Carlos Rojas al banquillo.

Alineación del Real Murcia para su partido. Fuente: Real Murcia.

Los granas estaban en un momento crítico, ha pasado una semana llena de críticas tras el último partido ante el Betis Deportivo. El tema que más se ha leído ha sido el de los pitos a los jugadores. Por eso, este encuentro era importante para levantar el ánimo de los aficionados pimentoneros. La primera parte no fue la mejor para corregir estos sucesos, eso sí, no se escuchar pitos. El Real Murcia no conseguía generar ocasiones de peligro, ni realizaba presiones en orden. El Alcorcón estaba encontrando salidas de una forma bastante fácil y rápida.

La opción de David Vicente tenía un gran objetivo, pero no se estaba llevando a cabo y por ahí sufría su equipo. Apenas llegaban a puerta los dos equipos, pero el que más se acercaba y asustaba era el conjunto alfarero. El centro del campo Yriarte-Moha no conseguía aparecer, el balón no pasaba por la columna vertebral grana. Las salidas de balón eran por las bandas y no se alargaban mucho las jugadas. Fran Fernández debía de hacer muchos cambios en la segunda mitad.

Alberto González celebrando un gol. Fuente: Real Murcia.

El inicio fue mejor a las sensaciones que habían demostrado en la primera parte, pero no estaba siendo suficiente. Hasta que llegó una faceta que ha aparecido este año en el Real Murcia, el balón parado. Una falta sacada por Pedro León era rematada por Alberto González para poner el 1-0. A partir de aquí, el Real Murcia se desmelenó y sacó su buen fútbol. La impresión de que era otro equipo, los granas estaban con confianza, eran más creativos, más sólidos, más ofensivos y todo les estaba saliendo de cara. En una transición perfecta, Jorge Mier a pase de David Vicente colocaba el 2-0. Los locales se confiaban y se relajaban, momento que el Alcorcón aprovechó para recortar distancias.

Los cambios de Fran Fernández eran para recargar baterías y que el equipo no se viniese abajo. Surgió efecto. El Real Murcia volvió a tener el control del partido en sus manos. Manejaban el encuentro a la perfección. Entraron los brasileños, Palmberg y Cadorini, que dejaron un par de acciones con peligro local. Hasta que pasado el minuto 90, una genialidad de tacón de Palmberg dejaba completamente solo a Cadorini delante del portero para marcar y sentenciar el partido.

Palmberg y Cadorini celebrando un gol. Fuente: Real Murcia.

El Real Murcia vuelve a colocarse líder de la competición. Está empatado a puntos con Ibiza y Ceuta, pero ellos lideran la clasificación. La jornada que viene visitan el Nuevo Colombino ante un Recreativo de Huelva que aún no ha conseguido ganar un partido en esta temporada. Los de Fran Fernández están obligados a dar una imagen similar a la de la segunda mitad si quieren seguir siendo líderes de la categoría. No se pueden permitir baches como la jornada anterior ante el Betis Deportivo. Aún así, el Real Murcia está cogiendo experiencia para afrontar todos los obstáculos que se le vayan apareciendo a lo largo de la liga. Sensaciones positivas, este Real Murcia tiene potencial, está carburando y solo acaba de empezar.