El FC Cartagena cosecha otra derrota. Las sensaciones en la ciudad portuaria no son buenas ni para el entrenador, ni para la afición. De momento han demostrado muy poco y los buenos momentos, además de cortos, no tienen continuidad
El fin de semana para el Efesé vuelve a dejar una semana de expectativas bajas y muchas dudas. Lo visto en el Carlos Tartiere generó más preguntas que respuestas, algunas de estas las contesto Abelardo en una rueda de prensa donde fue tajante, el objetivo del equipo es la permanencia. Estas semanas se conocían los datos económicos del club, siendo este el tercer peor limite salarial de la Segunda División, así se entienden algunas cosas.
Durante estos primeros partidos de liga se ha comprobado que al equipo le faltan muchas cosas. También el plan del Pitu es claro, basar el equipo en una buena defensa. Lo malo es que esto llevado al extremo te da el resultado visto frente al Oviedo.
En los anteriores encuentros el equipo vio destellos de algunas cosas que realmente puede hacer bien. Menos frente al Levante en el resto de encuentros se vio qué, si el equipo consigue defender bien el área y definir los automatismos para lograr realizar las contras efectivas puede generar peligro. Sin embargo, se está consiguiendo muy poco esto.
El partido frente al Oviedo mostró el mejor partido del equipo en cuanto a defender su portería se refiere, como sabemos esto no es suficiente. Pablo Campos es seguramente uno de los mejores porteros de la categoría pero, no puede acertar siempre en todos los partidos. El jugador cedido por el Levante hace que el equipo tenga tiempo para poder ponerse por delante, o al menos no ir por detrás. Solo necesita que arriba el equipo aporte también.
En Oviedo la situación fue complicada. Desde el comienzo el equipo se mantuvo atrás y no fue hasta el minuto 55 que logró tirar por primera vez. Una cosa es que el equipo genere poco, otra distinta es salir a sobrevivir desde el primer minuto contra un equipo que está una plaza por encima tuya en la clasificación y tampoco ha hecho un buen inicio de temporada.
Conforme avanzaba el partido el Oviedo llegaba a la portería de Campos pero, la mayoría de ocasiones fueron repelidas por la defensa. No fue hasta la segunda parte que el cansancio empieza a hacer mella. Si te pasas todo el partido corriendo tras el balón y tus posesiones no alcanzan ni cinco pases, es cuestión de tiempo que la fatiga afecte a la concentración de los jugadores.
El partido tampoco tuvo mucho más, el Cartagena tan solo tuvo dos tiros a puerta y con eso intentó resistir los embistes del conjunto asturiano. Jugando únicamente a que no te marquen, puedes tener suerte que una vez salga bien, lo normal es perder. Los de Calleja demostraron que querían más y al final se lo pudieron llevar, el equipo del Pitu parece que estaba haciendo pruebas. Al final salieron demasiado caras.
Otra semana entre dudas
Los albinegros pasaran otra semana en descenso y ,sin ánimos de ser agorero, comienzan a llegar recuerdos de Vietnam. Seguramente el Pitu es el primero insatisfecho con esta situación pero, hay que empezar a ponerle remedio antes de que sea tarde. Estaba claro como iba a ser el juego del asturiano, se le conoce muchos años, pero a estas alturas se esperaba más.
El técnico tiene razón en una cosa, la realidad del Cartagena es distinta a la de hace unas temporadas, el objetivo es la permanencia. Pese a esto se ven los mimbres de la plantilla y aunque vaya a estar en la pomada, el Cartagena debería ser de los equipos que luchan por no descender que más lejos estén de caer.
Las próximas semanas fáciles no van a ser y el conjunto cartagenero debe sacar fuerzas de flaqueza para darle la vuelta a esto. Ahora viene el Cádiz y toca visita al Sardinero, hay mucho que hacer y es imperioso sacar puntos. El equipo necesita un espaldarazo y conseguir sumar también en confianza porque sinceramente, no creo que lo visto hasta ahora sea lo único que tiene el Cartagena.
Estudiante de periodismo