El Cartagonova vivió una de esas noches que explican por qué la Copa del Rey sigue teniendo algo especial. El FC Cartagena rozó la gesta ante un Valencia de Primera División, compitió de tú a tú durante 120 minutos, golpeó primero, resistió cuando tocaba y tuvo en sus botas el 2-1 en la prórroga. Pero el fútbol, tantas veces injusto, castigó al Efesé en el último suspiro con un gol en el minuto 120 que dejó una sensación de tremenda crueldad en toda la afición albinegra.Fue una derrota dolorosa… pero de un equipo gigante.
Primera parte: un Cartagena valiente que golpea primero.
El partido empezó sin respiro. No había llegado el minuto 1 cuando Danjuma tuvo la primera para el Valencia: un pase profundo lo dejó cerca del área, pero Iván Martínez achicó de manera magistral abajo, salvando el 0-1.
El aviso no amedrentó al Efesé. En el minuto 5, Ander Martín rompió líneas por dentro y habilitó a Ortuño, que no pudo culminar su acción individual. Poco después, en el 8’, Calderón tuvo la más clara: mano a mano tras pase espectacular de Ortuño, pero el balón se marchó cruzado por muy poco.
Los primeros diez minutos mostraban un Cartagena valiente, hambriento y decidido a competir. Y siguió avisando: en el 16’, Nil Jiménez conectó con Ortuño, que se inventó una jugada embarullada de la nada y obligó a Dimitrievski a intervenir.
El premio llegó en el minuto 21. Recuperación de Ander Martín, conducción agresiva hacia el área y asistencia medida para Ortuño, que definió con potencia. Dimitrievski llegó a tocarla, pero no evitó que el balón entrara. 1-0 y explosión de alegría en Caratagova.
El Cartagena siguió apretando. Ortuño volvió a probar a Dimi desde lejos en el 25’. Y aunque el Valencia mejoró en los minutos finales de la primera parte, la ventaja al descanso era merecida: un Efesé intenso, ordenado y peligrosísimo en transición.
Segunda parte: el Valencia empuja y llega el empate.
Corberán movió ficha al descanso y metió a Hugo Duro para cambiar el guion. Los valencianistas empezaron a llegar con más claridad: en el 52’, Ugrinic obligó a Iván Martínez a otra parada de mérito.
El Efesé respondió como pudo. En el 61’, una contra bien trenzada por Luismi, Diego Gómez y Perejón terminó con un disparo centrado, la primera llegada clara del Cartagena en una segunda mitad donde el Valencia ya mostraba superioridad física y técnica.
Los de Javi Rey resistían, pero el empate llegó en el minuto 79. Un centro de Rioja, un rechace que dejó muerto Iván tras una gran primera intervención y Lucas Beltrán remató para poner el 1-1.
El tramo final del tiempo reglamentario tuvo emoción para ambos lados, incluida una ocasión clarísima de Diego López en el añadido que evitó Perejón bajo palos.
Prórroga: la gesta rozada… y la crueldad final.
El Cartagena empezó la prórroga con una ocasión brutal: en el 93’, Luismi rompió líneas con una conducción espectacular y asistió a Chiki, que definió cruzado… y el balón salió fuera por centímetros. Fue el momento que pudo cambiarlo todo.
En el 102’, Diego Gómez probó desde la frontal con un disparo potente que se fue alto. Pero el Valencia seguía empujando y golpeó dos veces los palos: Hugo Duro al larguero en el 105’ y Rioja al poste en el 113’. El Efesé defendía con todo, incluso con la expulsión de Santamaría que complicó todavía más el tramo final.
En el 119’, penalti sobre Kevin Sánchez. De Blasis tomó la responsabilidad, pateó abajo a la izquierda del portero… y Dimitrievski lo detuvo. El Cartagonova contuvo la respiración. Fue el segundo giro dramático de la noche.
Y en el 120’, llegó la puñalada final: un córner mal resuelto, un balón suelto, varios rebotes y Jesús Vázquez empujó a la red el 1-2. Un final cruel, durísimo para un Cartagena que había sido ejemplar.
Datos del partido:
Posesión: Cartagena 38% – 62% Valencia
Tiros totales: Cartagena 10 – 25 Valencia
Tiros a puerta: 4 – 8
Paradas: Iván Martínez 6 – Dimitrievski 3
Entradas: 25 – 7
Pases completados: 249 (73%) – 446 (86%)
Faltas: 10 – 14
Amarillas: 4 – 4
Rojas: 1 (Santamaría)
Sensaciones finales.
El FC Cartagena cayó eliminado, sí, pero cayó como un equipo enorme, dejando una imagen de compromiso, valentía y competitividad ante un rival de Primera División. El golpe en el minuto 120 dolió como pocas veces, pero dejó una certeza: si el Efesé compite así en Liga, este equipo puede mirar hacia arriba sin complejos.
Y ahora, sin tiempo para lamentos, llega un desafío mayúsculo: el derbi del próximo lunes, uno de los partidos más esperados del año. El Efesé llegará a esa cita con algo más que ganas; llegará con energía, fútbol y la confianza que dan noches como la de Copa, aunque el resultado fuera cruel.
Una derrota cruel… para un Efesé que anoche fue gigante y que afronta el derbi con el orgullo intacto.
